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El valor profesional de la «Empleabilidad»

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Bety Rodríguez

Desarrollo Humano Organizacional PWT/Especialista en la Gestión, Administración y Desarrollo del Talento

La Pandemia presentó una serie de complicaciones para el mercado y la fuerza laboral en todo el mundo y México no fue la excepción, el COVID 19 incremento el número de desempleados y modificó la forma del trabajo acentuado con ello la “brecha entre la oferta y la demanda laboral” es decir; existen empleos que cambiaron sus requerimientos / condiciones para poder ser cubiertos y encontramos personas que no cubren ciertos requisitos para ocupar determinadas posiciones o bien logran el puesto pero no pueden mantenerlo por falta de habilidades y conocimientos.

Al mismo tiempo los cambios generados en el mercado laboral originados por factores externos como la pandemia y la reacción en cadena que impacto internamente a organizaciones y profesionales, nos obligó a adaptarnos a nuevas formas de hacer negocio y de trabajar encontrando colaboradores (empleados) enfrentándose por primera vez al home office y a desarrollar nuevas habilidades tecnológicas y personales, en algunas situaciones a riesgo de decremento de sueldo y de horas productivas, cambio de funciones e incluso a drásticamente a un despido y por otro lado empleadores (empresarios o/y organizaciones) buscan adaptar sus modelos de negocio y estructuras organizacionales a la nueva realidad del mundo para no desaparecer.

En mi opinión una estrategia para lograr un entendimiento y alineamiento entre las dos fuerzas que mueven el mercado laboral es la EMPLEABILIDAD.

Según la Organización Mundial del Trabajo la Empleabilidad “es la aptitud de la persona para encontrar y conservar un trabajo, para progresar en el trabajo y para adaptarse al cambio a lo largo de la vida profesional”

La empleabilidad en una persona es la actitud de concebirse como un proveedor de servicios que agrega valor e innovación constante a su trabajo, permitiéndole mantenerse vigente y ser reconocido en el ámbito de su especialidad.

  • Un colaborador (empleado), puede ejercer su empleabilidad modificando su actitud hacia el trabajo y reconocer que el pago que recibe es por generar logros, aportaciones y resultados por los que empleador lo contrato, cada persona es responsable de cumplir las tareas encomendadas y de hacerlas cada vez mejor para asegurar que el empleador (cliente) se encuentre satisfecho con las habilidades, destreza, conocimientos y habilidades, en la medida que brinde una experiencia satisfactoria el cliente seguirá contratándote es decir; conservar el trabajo.
  •  Bajo la perspectiva del trabajo como una ocupación que permite el desarrollo y la plenitud de la vida profesional, las personas que se encuentra en búsqueda de un empleo deberán activar su empleabilidad con un ejercicio de introspección y cuestionamientos, ¿Qué quiero hacer? ¿Qué me gusta hacer? ¿Para qué soy bueno o talentoso? ¿Qué requiero saber para obtener el puesto que deseo? y ¿Qué tan empleable soy?. Identificar la empleabilidad es abrirse al entendimiento de las realidades propias y las del mundo del trabajo, siendo así nuestra responsabilidad tener un nivel de servicios que el mercado actual demanda e ineludiblemente generar un plan estratégico de búsqueda de empleo que incluya todas las herramientas para potencializar el nivel de empleabilidad requerido en la actualidad y para el futuro.
  • ·Para el empleador (empresas) disminuir la brecha de la empleabilidad le compete a la Administración del Talento, identificando claramente las competencias, habilidades y el propósito de los puestos en la organización, siendo esto la base para una búsqueda del talento sencilla y efectiva.  La Gestión del trabajo también suma a la empleabilidad, brindar experiencias satisfactorias para las personas dentro de los centros de trabajo enmarcará el engagement y una cultura de trabajo sana y segura, comunicar y acordar con los colaboradores metas y resultados, establecer en conjunto métricas e indicadores, brindar la capacitación, herramientas y equipos necesarios para el ejercicio del trabajo, otorgar un feedback oportuno y objetivo.  -Valorar y respetar a las personas que conforma el recurso humano respaldará la calidad y competitividad de la empresa-.

Considero entonces que la empleabilidad es una virtud que los profesionales debemos activar para obtener prestigio, valoración de nuestro trabajo y el derecho elegir donde emplearnos.

Recomendaciones básicas para activar tu empleabilidad

1.      Identifica fortalezas y áreas de oportunidad personales y profesionales.

2.      Genera un plan de desarrollo de formación. (capacitación, seminarios, lecturas) incluyendo tendencias del trabajo y tecnología.

3.      Mantente informado sobre la realidad del contexto económico, social y político de tu país ya que este afecta del mercado laboral y sus oportunidades.

4.      Aprovecha tus talentos especializándote en las áreas de interés o de tu ámbito.

5.      Fortalece tu marca personal compartiendo información de valor, aprendiendo y construyendo relaciones con colegas, amigos, antiguos empleadores (clientes), gente nueva que comparta los mismos intereses y quienes puedan bridar una buena referencia.

6.       Mantén siempre actualizado tu CV, registrando a cada momento avances y logros, proyecta una imagen personal y visual impecable (incluye redes sociales).

7.      Mantente alerta al cambio, sé flexible, curioso y muestra disposición para aprender cosas nuevas. 

 Bety Rodríguez

Especialista en la Gestión y Desarrollo del Talento. 

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